En octubre de 1981, un varón de 35 años ingresó en el Hospital Vall d’Hebron con dolor de cabeza y lesiones cutáneas de color púrpura; murió cuatro días después. Fue el primer caso de sida descrito en España. Hasta 1983 no se logró aislar el nuevo virus que causaba esta enfermedad mortal, el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH).

En estos 40 años de historia de la enfermedad, en el mundo han muerto de sida más de 40 millones de personas, de las cuales, 60.000 en España. En la actualidad hay en el mundo 38 millones de personas infectadas con el VIH, según la OMS. Anualmente se produce 1 millón de fallecimientos a causa del sida y se infectan 700.000 personas. Durante los 10 primeros años de la historia del sida en EE. UU., la infección por VIH llegó a ser la primera causa de muerte en personas de entre 20 y 40 años.

A mediados de los ochenta apareció el primer tratamiento contra el sida, el AZT, pero tenía poca efectividad. Hasta 1996 no aparecieron tratamientos eficaces, un conjunto de antirretrovirales que conseguían controlar la replicación del virus. Pero la gran mejora no llega hasta 2010, cuando aparecen medicamentos con menos toxicidad y más fáciles de tomar, los inhibidores de la integrasa, que convierten el sida en una enfermedad crónica. Hoy en día, muchos pacientes con sida toman una única pastilla al día y pueden llevar una vida normal. Sin embargo, sigue sin existir una cura. El tratamiento antirretroviral es capaz de controlar muy bien la replicación del virus, pero no cura la infección.

Actualmente, la investigación en VIH y sida está centrada en dos grandes retos:

1. Conseguir una vacuna preventiva o terapéutica contra el VIH.
2. Identificar una estrategia de curación que permita eliminar el virus en un paciente infectado.

Ambos retos llevan acumulados años de investigaciones prometedoras, pero también fracasos. ¿Por qué es tan complicado diseñar una vacuna efectiva contra el VIH? ¿En qué momento están la investigación y la innovación en torno a una posible vacuna? ¿Cuáles son los principales obstáculos y diferencias con, por ejemplo, las nuevas vacunas creadas contra el coronavirus? ¿Por qué en un año se han podido diseñar distintas vacunas contra la COVID y, en cambio, llevamos 40 años buscando una vacuna contra el VIH sin éxito? ¿Qué hace que el VIH sea más complicado de atacar y de vencer que otros virus?

En lo referente a la eliminación completa del virus del cuerpo de un paciente, como los casos del paciente de Berlín y el paciente de Londres, ¿qué impedimentos existen para que se pueda replicar este procedimiento en pacientes de sida? ¿Por qué no es sencillo replicar la estrategia seguida en los casos de estos pacientes de Londres y Berlín? Y, por último y teniendo en cuenta los esfuerzos internacionales en investigación e innovación, ¿para cuándo una cura o una vacuna?

Ponentes:

• Dr. Julià Blanco, jefe de grupo en IrsiCaixa, Instituto de Investigación del Sida Fundación ”la Caixa” e investigador del Institut Germans Trias i Pujol.
• Dra. Beatriz Mothe, médica y jefa de grupo de investigación clínica en inmunología, vacunas y farmacología del Servicio de Enfermedades Infecciosas e investigadora asociada a IrsiCaixa, Instituto de Investigación del Sida Fundación ”la Caixa”, en el Hospital Germans Trias i Pujol

Moderadora:

• Ariadna Oltra, periodista y presentadora de TV3.